Pero centrémonos...
A las 08:15 recién amanece, en las piscinas de Hospitalet, presentes Alberto, Roberto, Mariano, Poci, Sergio y yo por parte de la Grupeta y Jordi, Óscar, Roger, Paco y Andrés por parte templaria. Tras las rápidas presentaciones comenzamos ruta. El día, a pesar de la terrible humedad, apunta a que va a seguir la tónica de estos últimos meses...
Son muchos los días en que no coincidimos con Alberto y dedicamos la autovía a ponernos al día, la tranquila marcha solo la perturba la bolsa de aire caliente de la Pava, una curiosa situación que ha alterado la húmeda matinal y la sensación de fresco.
Rápidamente nos plantamos en el pie de costas. Tras una maladoneta mas bien suave, Jordi pasa a la cabeza...en un santiamén arrasa el pelotón que formábamos, es el momento de ir cada uno a su aire, o como pueda...
En Sitges las gracietas del wasap dejan paso a la indecisión, que si almuerzo, que si aquí, que si allá, que si la mayoría, que si la minoría...en definitiva acabamos tomando un café en San Pedro de Ribas, por lo menos la tertulia ha valido mucho la pena.
Pero tras "almorzar" vuelve a reinar el caos, nadie se pronuncia sobre la ruta de retorno, si se alarga, si se acorta...aquellos que tienen obligaciones horarias vuelven por donde han venido, los que no, seguimos la propuesta de Óscar de dar vuelta por el Casino. Aquí nueva confusión solventada afortunadamente.
Costas de regreso con mucha presencia de ciclistas, de nuevo las pasamos bastante rápido, sobrepasando a cuantos grupos se nos han puesto a tiro. En pie de costas de nuevo parón, aquí ya nos dejan los templarios mientras esperamos a Mariano.
Ya solo nos queda deshacer la autovía hasta alcanzar la muy noble y fiel ciudad de Hospitalet.
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