Mañana nublada en que solo he quedado con el amigo Mariano. Buen inicio entre animada tertulia hasta que nos alcanza un trío de señores triatletas silenciosos que debían andar peleados entre ellos ya que no se han dirigido la palabra en toda la autovía...Mariano y yo aprovechamos para charrar lo que ellos no hacen y beneficiarnos de la inercia rodando a su rueda.
En costas los enfadados no se atreven a pasar los repechos junto a nosotros, así que con Mariano pasamos unas pacíficas costas, comprobando lo bien que vamos de hora.
El paso por San Pedro y Cañellas se realiza con la misma tónica.
Avituallamiento en Molanta sufragado por el espléndido Mariano.
Nos sobra tiempo así que aproximamos el inicio al ordal por San Pablo del Ordal, el viento es frontal y bastante molesto...y fresco.
Coronamos el Ordal y ya se ven los prolegómenos de la vuelta. Al poco del descenso un mozo con exceso de celo decide detenernos porque dice que "ya vienen los ciclistas". No nos cuadran los horarios y aprovechamos el despiste del agente para bajar al punto donde queríamos ver el paso del pelotón: El Lladoner.
Tras el paso de los ciclistas rápido descenso buscando Hospitalet...y la ducha. En media hora hemos quedado en el metro para ir a Montjuich.
En la montaña de la ciudad vecina disfrutamos del paso de los profesionales, también nos encontramos con Sergio y Roberto junto a sus respectivos vástagos.
Tras la victoria de Modolo nos encaminamos a nuestra gran diversión: Los autocares de los equipos.
Como botín María y yo conseguimos bidón del Sky...olé.
