Entre las tradiciones de las fiestas navideñas, la de pedalear el día de nochebuena, es una más.
Ya son muchos los años en que salgo a rodar este día, será coincidencia, pero año tras año, y que siga, mi día de nochebuena se inicia con una ruta en bici.
Este año, coincidiendo con el sábado, y ante una Navidad dominical, adelantamos la ruta de la Grupeta para juntarnos, los que podemos, y rodar un rato en tan indicado día.
Y digo esto al hilo de algún lamentable episodio que he padecido estas últimas jornadas, merced al neo progresismo-correctamente político del perroflautismo al que estamos sometidos, ya que algún imbécil se dedica a felicitar las "fiestas de invierno"... idiotez en estado puro. Yo sigo y seguiré celebrando la Navidad, señores, LA NAVIDAD!!!!
Pero dejaré las disquisiciones de opinión y paso a relatar la ruta de hoy con la grupeta.
Al filo del amanecer, en las piscinas de Hospitalet nos reunimos Alberto, Roberto, Javi Perona y un servidor. Fenomenal mañana la que ha salido, con una temperatura muy agradable (convenientemente equipado) aún estando ya en invierno.
En la rotonda de las Filipinas se nos une Miguel, buen paso de la autovía con fluidos relevos que nos dejan rápidamente en el pie de costas.
Las costas siempre son el rato de jugar, y aunque hoy empezamos muy suaves, excepto Miguel que ya de inicio se marca una serie infinita, con el paso de los kilómetros (y de las otras grupetas) nos vamos animando.
Al paso por la Maladona somos alcanzados por unos activos camaradas que no saben donde se meten. Los pobres no hacen sino despertar al la bestia parda de Javi...y el resultado para ellos es devastador...
Sin apenas forzar se deshace de los más aguerridos, yo en mi butaca a rueda, voy disfrutando de el paso de los cadáveres que va sembrando en las subidas, y sin proponermelo me quedo solo tras el...ni el arreón que pegan en el último tramo les permite alcanzar a Javi...y yo, sin querer, me vuelvo a quedar delante sin tan solo esprintar.
En Sitges hacemos la primera parada del día, y es que esta jornada merece ser disfrutada a dos paradas...como la F1.
En la era nos encontramos con los viejos amigos de la Collblanc, un placer charlar un ratito y desearnos felices fiestas unos a otros.
Alberto, Roberto y Javo emprenden el regreso, Miguel y yo continuamos hacía Molanta diseñando la ruta de retorno y variando el tradicional Ordal por la carretera de Begas.
Café en Molanta y tomamos la carretera en Aviñonet, lo cierto es que el tráfico en este tramo, hoy, ha sido muy molesto e intenso, pero ya estábamos aquí, así que...
En animada tertulia nos encontramos ya al borde del húmedo descenso de Begas. Finalizado me despido de Miguel y ya afronto, por los huertos, mi regreso a Hospitalet.
Amigos, a todos vosotros os deseo una FELIZ NAVIDAD con vuestra familia y amigos, que el Niño Jesús os traiga felicidad.
