Ayer mientras cruzaba las costas tuve la sensación que el tráfico, aunque abundante, no nos engañemos, estamos hablando de una ruta muy transitada incluso por vehículos pesados, decía que aunque abundante era más que asumible, incluso diría que menor que en fin de semana...
Pero estas sensaciones tan subjetivas necesitaban una confirmación externa...y esa confirmación ha venido de la mano del amigo Hispter, Alberto. Hemos compartido mañana de ruta por las costas y la conclusión que hemos alcanzado ha sido la anticipada por mi...hay menos tráfico.
Puede que sea porque quien emplea esta carretera de las costas en día laborable es habitual de ella, con lo cual su conocimiento es mayor así como su destreza al volante. Esto provoca que la sensación de agobio no sea la que se tiene en domingo (o sábado) cuando esta carretera se puebla de los famosos domingueros, ávidos de aperitivo y vermouth, que llegan tarde a su destino dominical, que bien aceleran para adelantarte al filo de lo imposible, bien no adelantan en kilómetros y kilómetros originando una sinfonía del bocinas absolutamente demencial...y es que estos personajes llevan su estress laboral hasta el mismo fin de semana...
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