Nueva jornada sobre ruedas.
Hoy comienzo guiado por el aire, que soplando de mar a tierra me lleva hacía el interior. Atravieso veloz San Boi, Palleja, Martorell...llego a Olesa y aquí se me plantea una duda: ¿Montserrat o Terrasa? el buen juicio y la amenaza del viento en la vuelta me lleva a elegir la opción de Terrasa.
Desde Olesa el terreno se ondula mas y mas, la carretera se vuelve brava, el calor (si bien no muy intenso) continua siendo ultra bochornoso...sudo, sudo mucho, muchísimo...
Paso por Viladecavalls gente en una piscina abarrotada, al llegar a Terrasa misma imagen, otra piscina abarrotada...yo casi igual de mojado comienzo la ascensión a los 4, opción que tomo para descender camino de Castellbisbal y así mitigar el huracán que ahora me azota en el morro.
Con mas esfuerzo del necesario llego a Molins, y tanto es el agobio del viento que decido subir la Creu de Olorde. No muy convencido por el tute que llevo, afronto la cuesta, y poco a poco voy cogiendo un buen ritmo y me planto en la cima muy entero, mucho mas que he empezado...paradójico.
Animado decido estirar hasta el Tibidabo. Descenso rápido y en casa a recuperar.
Carretera serpenteante y brava...
...piernas sudadas...
...pero sin perder la sonrisa...
...coronando Olorde...
...y ya en casa a recuperar con pasta y productos de la tierra... olivas, vino y aceite de Teruel...y es que siempre hay que tener cerca los orígenes...en este caso en el estómago.
No hay comentarios:
Publicar un comentario