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jueves, 19 de enero de 2017

NO LO HAGAN EN SU CASA

Tarde de vendaval en la que he decidido no salir a rodar y dedicarla al mantenimiento y reparación de mi bici. Básicamente, cambiar la cadena y la roldanas de cambio.
La suerte de ser un Juan Palomo en lo del ciclismo son cosas como esta, me entretengo y no he de llevar la bici a ningún mecánico...por cierto que mi bici no ha sido tocada nunca por ningún otro mecánico más que por mi.
No animaré a quien no es muy ducho en el bricolage ciclístico a intentar este tipo de mantenimiento, también han de vivir las tiendas, pero a poca mano y cabeza que se tenga, es de lo más sencillo.
También es destacable resaltar la duración de los materiales, muy lejos de los postulados de fabricantes y mecánicos que pretenden obligarnos a cambiar repuestos cada muy, muy, muy pocos kilómetros...hablando de un supuesto desgaste y una serie de historias que no diré que sean falsas...pero que mi experiencia me demuestra que no se ajustan a lo que he visto y vivido.
Para escalofrío de muchos, anunciaré los números de mis piezas sustituidas...la cadena KMC (para mi gusto esta sl Ti Gold es la mejor del mercado) ha resistido sin problema, repasando los números acumulados con exactitud, unos 17.000kms, cierto que después de cada salida la limpio y cada 150kms la engraso, un buen mantenimiento que permite alargar la vida de la cadena hasta límites insospechados...por supuesto que el funcionamiento ha sido perfecto y la sustitución es más por el tiempo en uso que por otra cosa.
Las Roldanas del cambio han tenido una vida intensa, son las de origen de mi bici...140.000 kms lo dicen todo, han perdido algún diente...pero han cumplido hasta el último suspiro...








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