Había que salir...tras tantos días parado, si exceptuamos el remojón del domingo, ver una tarde sin lluvia anima el ánimo.
Pero Eolo se ha encargado de martirizar la tarde, al caso de casi hacer en llano un puerto de 50 kms. Llaneando a duras penas a 20 km/h con un viento sostenido y fortísimo, por suerte casi no había rachas (¿para qué si ya era intensísimo?) así que el peligro que traen no ha existido.
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