De nuevo a pedalear, hoy en una brumosa, gris y plomiza matinal.
En las piscinas nos juntamos Roberto, Migué y yo...Mariano se ha dormido y se nos unirá en el regreso.
Ritmo muy suave y pausado, nos hemos dejado llevar por las Zetas de Migué, así que sin forzar nada nos plantamos en Sitges y nos tomamos el café.
Nada más salir a las costas tras el avituallamiento nos reencontramos con Mariano. La tónica es similar, sin forzar, buena charla, ritmo muy pausado y soportando el viento y lo plomizo del día...menos mal que la compañía es luminosa.
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