Los Estados Unidos han elegido presidente...y el elegido no es del agrado...de los europeos. Vamos que los americanos están consternados consigo mismos por su tamaño error.
Veo, leo, oigo, opiniones de opinadores del neoprogresismo, poco menos que presagiando la hecatombe, el apocalipsis, la repanocha vamos.
Y mira yo por donde, que preocuparme, preocuparme...pues no me preocupo, si al fin y al cabo que mas da el uno que la otra, y si los americanos, que son los que están allí, y los conocen más, lo han elegido, pues por algo será.
Dejémonos de tonterías, si al fin y al cabo, como pasa aquí y en todos los lados, quienes acaban mandando en realidad son los poderes económicos y a estos se la bufa el que esté...
Para terminar un pequeño apunte...el tratado este de libre comercio que tantas protestas entre el mundo progre ha suscitado...Trump (el fascista) anuncia en su campaña que lo va a paralizar...a ver si al final el pobre Donald es un perro flauta de la CUP?
Yo mientras, ajeno a los Estados Unidos, regreso a la montaña de Colserola, a subir Olorde. Y aún sigo quitándome los mocos que me ha lanzado el ciclista junto al que he subido...¿tanto pesa un Kleenex?
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