Mañana que afronto en solitario, el Doctor Encantador esta preso de las garras de Morfeo, y tampoco es que ofrezca una feroz resistencia...de esta manera, y pese a que he salido a las diez menos cuarto de la mañana, el ínclito amigo rechazó la oferta de entreno.
Por tanto es mi oportunidad para experimentar nuevas rutas.
Llevaba tiempo curioseando vía satélite, una carretera que parte de la Rabassada. Finalmente pude seguir su ruta y memorizando los dos cruces que hay me he atrevido a realizarla hoy...mas adelante os la detallo por que no tiene desperdicio.
Pero lo mas interesante de la ruta ha sido otra anécdota acontecida poco antes de adentrarme en esta desconocida carretera...vayamos por partes...
...Afronto la salida subiendo directamente al Tibidabo, a bote pronto, a balón parado, casi mejor por que la mañana es fría y así caliento.
Llegado al Tibidabo me dispongo a descender los dos kilómetros que me separan del cruce de la mencionada y misteriosa carretera, y es aquí el punto anecdótico de la jornada: Unos simpáticos urbanos se hallan en el cruce de la Rabassada avisando por la aparición de hielo en la carretera. Primer punto a comentar...¿no son los Mossos los que tienen las competencias de tráfico? ¿acaso tenían frío?...muy amablemente le consulto al urbano si hay peligro, me comenta que yendo con cuidado y contando que ha pasado la máquina de la sal, no debería haber problema...así que tiro para abajo. Segundo punto, según desciendo compruebo que la alarma por hilo no debe ser tal, no hay hielo por ningún sitio (ni lo ha habido)...el problema ha sido que la humedad de la noche ha humedecido la carretera de tal manera que unido a la suciedad de la carretera (aceite, gasoil,...) se forma el famoso "jabón Nenuco" que convierte el piso en una pista de patinaje...pero hielo...para nada. Carretera resbaladiza por la humedad y la suciedad, SI...pero hielo, PARA NADA.
Tras esto continuo con la ruta. Llego al cruce y afronto la carretera, sin ninguna confusión la sigo llegando sin mayor novedad a la carretera de Las Planas. Este es un tramo que tiene su miga, en la dirección que lo he hecho el problema es el vertiginoso y peligroso descenso final, es poco mas de un kilómetro con desniveles de hasta un 21%, una pared. Otro día lo intentaré subir, pero esperaré a primavera o verano ya que hay zonas donde la tracción en días como hoy es muy complicada de mantener (hay zonas incluso cementadas)...un camino muy recomendable, bien asfaltado y con unos rampas de calidad.
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