Vistas de página en total

martes, 5 de julio de 2016

LA ROPA SUCIA SE LAVA EN CASA

Esta frase que debería ser dogma de fe, resulta que algún personaje no la aplica...y ya no digo en el sentido figurado, lo digo en el sentido literal.
No es extraño que en el verano, con el calor y las sudores, a alguno le cante el ala mas de la cuenta...pero eso no es excusa cuando ya no es cante, sino lamento. Y este lamento lo he padecido subiendo Olorde, por suerte han sido solo un par de kilómetros, pero que suplicio...me alcanza un ciclista que sin mediar palabra me pasa (otro pobresional) yo voy tranquilo, pero como el tipo no va muy fuerte me pongo a rueda...pero en ese momento el hedor que emanaba esa ropa, que no ha visto lavadora en el presente año, me ha echado para atrás..lo malo es que el individuo no andaba mucho así que tengo que decidir si parar o irme para adelante...al final me puede la velocidad. Le sobrepaso sin respirar, para evitar de nuevo el nauseabundo olor del personaje, ya delante lleno mis pulmones de aire limpio, vaya maravilla. Voy deprisa, el tío se pica pero yo no me pienso someter de nuevo a la tortura olfativa, así que sin bajar de los 20 km/h acabo coronando Olorde. Al comenzar el descenso finjo parar a mear...que se vaya...y sobretodo que ponga hoy la lavadora, total son 15 minutos en el programa corto, la tiendes y con este calor mañana está limpia y seca...

El día aparte de esta anécdota ha sido bastante contundente en lo ciclístico, ruta a Vacarisas, subo por los Caos al Obac y de vuelta subo a olorde esperando encontrarme con Nacho que me dijo que hoy igual pasaba por ahí...y no ha pasado, quizás el ciclista hediondo lo ha neutralizado en el ascenso, pero no le iba a preguntar a este si había visto a mi amiguete Nacho...










No hay comentarios:

Publicar un comentario