Si el medievo tuvo la Peste Negra, hoy en el siglo XXI tenemos el coronavirus...y lo más triste es comprobar cómo, pese a lo que pensamos, no hemos avanzado tanto, bien al contrario, parece que vamos para atrás.
La Peste asoló Europa y por extensión el mundo conocido en repetidas ocasiones durante la Edad Media, como el coronavirus, esta epidemia provenía de Asia.
Los galenos medievales, sin tanta preparación como los actuales expertos, ya encerraron ciudades y villas...parece que no hemos avanzado mucho en cuanto a soluciones ante una epidemia: todos encerraditos y a callar...lo que ocurre es que en aquella época eso de aislarse en casa (sobretodo en una urbe) era imposible, así que como hoy día, se cerraban las murallas de las ciudades no fuera que el virus entrara.
El clero, con gran poder en aquella época, hoy ha sido sustituido por otros inquisitoriales personajes en forma de políticos...y si entonces la culpa era de los pecadores que habían traído la plaga por sus pecados, hoy es de la gente que no obedece los mandatos (siempre correctos) de nuestros próceres. En esto hemos ido para atrás ya que por lo menos la iglesia, si hacías acto de contricción aún podías ir al cielo...hoy ya te puedes arrepentir que como no hay cielo, lo único que sacas es irte a cascarla.
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