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domingo, 3 de marzo de 2019

VII MEMORIAL ALBERT BALBIS

Un año más acudimos a la cita con la familia Balbis y por extensión con el Velo. Son ya siete las ediciones del Memorial Albert Balbis, un día que se ha convertido ya en tradición a modo de homenaje y recuerdo para los amigos que nos han dejado estos años.
 La grupeta hoy ha mostrado su lado más numeroso, en las piscinas nos hemos citado Mariano, Alberto, Roberto, Nacho, el abuelo Poci, Migué, Los J's (Jesús y Joaquín acompañados por dos nuevos amigos a los que doy la bienvenida a la Grupeta y que espero repitan; Juan y Rafa), un servidor y el amigo corredor Sergio que nos espera en la plaza del mercado de Colblanch.
En la salida las habituales sesiones fotográficas y de salutaciones con todos los amigos allí presentes.
Ya metidos en faena, inicio más que pausado por la carretera de Colblanch, incluso con una alarmante ocupación del nefasto "carril Bici" que algún iluminado ha diseñado en dicha carretera, algo que mi club nodriza debería reconsiderar. Y es que pasar este tramo sin los ataques de antaño hace que nos demos cuenta de que los tiempos han cambiado...y mucho.
Pausada marcha hasta el reagrupamiento en el congost de Martorel.
Después se inicia el tramo de más prestación ciclística, además con un impertinente viento frontal que dificulta la marcha, sobretodo en el tramo entre Olesa y el pie del funicular. Antes nos dejan Alberto y Nacho, en proceso de acumulación de kilómetros.
Nuevo reagrupamiento y damos paso a los parlamentos en la curva donde está la placa de homenaje a Albert. Ahora son los J' y sus amigos quienes emprenden regreso, a ver si se nos unen de nuevo en breve.
Tras las palabras del presidente la grupeta se dirige hacía Colbató y Esparraguera donde celebramos el cumpleaños de Mariano, que generoso, nos invita a los cafés.
La vuelta en buena armonía nos lleva por los Once, escepto a Roberto y a Migué que se pegan un recto.
Tras el paso de Castelbisbal el viento empieza de nuevo a incordiar, en Molins el Poci decide pegarse una Olorde, y es que le faltan kilómetros...
El trío restante formado por Sergio, Mariano y yo avanzamos ya hacía Hospitalet, venciendo la Samson, y dando por concluida una preciosa mañana de ciclismo y amigos.



















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