PUENTEANDO LAS NUBES

Me levanto por la mañana y el plomizo cielo me lleva a regresar a los brazos de Morfeo, pienso que en breve empezará la llover...pero no. Así que conecto el radar, me niego a pasar mi puente festivo sin salir a rodar aunque sea solo un ratico, la previsión es buena, por tanto me cambio rápidamente y salgo al asfalto.
Ruta que inicialmente me iba a llevar hacía la costa pero que ante la presencia violenta del viento, decido variar ruta y encaminarme a la montaña, a realizar la socorrida ascensión a la Cruz de Olorde y al Tibidabo.
Plácida subida, sin apenas presencia de ciclistas, más allá de los de la rueda gorda. Asfalto mojado y brumas presentes toda la mañana...
...y misión cumplida!!! el puente sobre ruedas.