En las piscinas de Hospitalet encuentro junto a Alberto, el flandrien de la Grupeta. Vistazo al amenazante cielo, nada tranquilizador, pero salimos adelante.
Rodar con Alberto es un placer tanto en el apartado ciclístico como en el apartado tertuliano...ya de inicio no damos tregua a la charrada.
Hoy es la Liada Nazional de Cataluña, obviamente el tema lo tratamos, coincidiendo en nuestras posturas, enérgicas y contundentes, abordamos el problema pero de manera breve, no vale la pena extenderse en estas fábulas separatistas y rápidamente pasamos a repasar el panorama ciclístico, tanto a nivel personal como a nivel profesional. El Tour a toro pasado y la vuelta en plena ebullición.
En el ardor de la charla vamos devorando los kilómetros, la lluvia amenaza y al paso por Pallejá se muestra contundente...pero es un momento...luego seguimos en seco camino de Olesa.
Café en Viladecaballs, ya que la ruta es clásica, con la única variación de la ascensión a Las Planas.
Es en el descenso de las Planas el único momento en que el asfalto aparece mojado, pero sin más riesgo que el que cada uno quiera asumir...y nosotros no somos de riesgos.
Casi sin sentir concluimos ruta, acabo con la sensación de acabar de salir, se me ha pasado la mañana volando, en gran compañía...y esquivando a la lluvia.
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