Aún pecando de reiterativo año tras año, he de decir que esta es una preciosa jornada de recuerdos y de reencuentros, una alegría compartir kilómetros con los amigos de siempre...Velos, Tusinos, los antiguos Medinas...compañeros de pedaladas durante décadas. Y no solo de clásicos y eternos pedalistas vive el hombre, también destacable presencia de nuevos ciclistas en el Velo, espero que sepan ser herederos de la gran clase y tradición que inundo este insigne club durante ya casi medio siglo.
La Grupeta nos citamos en las Piscinas de Hospitalet para subir hasta el mercado de Colblanc, el clásico punto de salida del Velo. Hoy somos el núcleo duro, Mariano, Roberto, El abuelo Poci, Javi P y yo. Paco P nos espera en la plaza del mercado, repartiendo equitativamente la representación de los Perona's Brothers entre sus dos Clubs.
En la plaza del mercado nos aguardan los saludos y la sesión fotográfica, pasada la cual iniciamos ruta...de manera muy tímida, casi sin sentir voy por delante, y es que esto del ciclismo especulativo hace mucho daño. Charlando con el Balbis tememos que lleguemos tarde al corte de carretera programado por los Mozos.
Yo sigo aún en solitario y sin miedo al viento de norte que pega inmisericorde y helador.
Pasado Molins me encuentro con Nico y entre charla y risas nos alcanza el grueso del pelotón, ya en la chatarra.
La llamada al orden provoca que la velocidad se incremente, llegaremos en hora.
Avispillas en el congost, la frescura de la sangre empuja mientras Mariano y yo comprobamos en primera fila el avispero.
Tras el reagrupamiento pasamos por las Chopera ya en modo Velo, buena velocidad, alguna avispilla y algún culebreo juvenil. Entramos en Olesa como una manada de lobos, pero uno que sabe de que va esto aprovecha para soltar la avispilla de la jornada...y va a ser la buena. Cuando veo que quien responde a mi ataque es el Bombi (Tusino pata negra 100%) y que además el viento es fuerte de cara, empiezo a ver el éxito en la acometida.
Buenos relevos hasta el aéreo de Montserrat que nos permiten llegar con cierta holgura culminando uno de esos momentos tan épicos del Velo y de la Tusinada .
En la subida a Colbató se realiza la ofrenda floral y los parlamentos. Nosotros seguimos hacia Esparraguera para avituallar sufragados por JaviP.
Regresamos con Eolo de aliado, buen ritmo y alta velocidad. En el cruce de los 11 Javi hace un recto a casa y el resto seguimos cuesta arriba para luego ir cuesta abajo.
En Molins el abuelo subirá la cruz de Olorde, ya que necesita kilómetros y desnivel...nosotros tres seguimos haca Hopsitalet vía Cornella, cumpliendo una preciosas jornada pedalística.
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